
La Azucarera de San Isidro se construyó en 1901 para producir azúcar. Una iniciativa que sirvió para dinamizar la industria en una zona anteriormente agrícola y convertir ese sector –el del azúcar– en uno de los de mayor impacto en la economía local. Algo más de un siglo después, y tras unos años de olvido, la Azucarera de San Isidro vuelve a convertirse en un lugar estratégico para la ciudad que la acoge gracias al proyecto de la Ӱԭ que lo convertirá en un espacio cultural y de innovación e investigación especializado en sostenibilidad, nuevas tecnologías y otras ramas investigadoras. Por ello, la universidad de Granada tiene especial interés en dar a conocer a la sociedad ese entorno. Y lo hace a través de una gran exposición, Azucarera San Isidro. Una historia con futuro, la muestra que recorre el pasado y el futuro de este magnífico espacio llamado a ser foco investigador y cultural de relevancia en la Granada del futuro.